Cuaderno de ruta
Viaje Route 66 Los Angeles-Chicago | Agosto 2023 | Día 7 | Albuquerque-Amarillo
Bienvenidos al diario de nuestro viaje Route 66 Los Angeles a Chicago. Hoy es el día 7 de este apasionante viaje en moto por la carretera más carismática de EEUU.
Amanecemos en Albuquerque, New Mexico. Desayunamos en el motel y enseguida nos preparamos para salir. Una nueva etapa del viaje route 66 va a comenzar.
Hemos repostado gasolina antes de salir, así podremos no preocuparemos de hacerlo de camino. Tenemos un pequeño tramo de Route 66 y una etapa de interestatal 40 que nos viene bien para avanzar millas.
Hacemos una pequeña parada en el clásico Clines Corners, nos sirve para estirar la piernas por que vamos a hacer otra etapa de 40.
El plan es desayunar en Santa Rosa y nos habremos quitado casi 200 km de etapa. Esta zona es muy deshabitada, y no existen ya tramos del antiguo viaje route 66. Pero haremos las paradas en los lugares interesantes que sí hay histórica 66.
El habitual Sun & Sand no abre hoy, por lo que aprovechamos para probar un restaurante mexicano nuevo. No ha sido de nuestro agrado la verdad. La comida estaba bien, pero la atención no mucho.
Y aquí, en este histórico pueblo de la 66, vamos a hacer una parada interesante para visitar un museo de coches clásicos americanos, el Route 66 Auto Museum.
Anna, la mujer de James “Bozo”, siempre es muy amable con nosotros, y habla español.
El museo se centra en la cultura y la historia de la Ruta 66 en la automoción, y exhibe una impresionante colección de automóviles. Aquí se puede disfrutar de una variedad de vehículos clásicos y antiguos que representan diferentes épocas a lo largo de la historia de la Ruta 66.
Seguimos ruta hasta Tucumcari, New Mexico. Tucumcari tiene una rica historia que abarca desde la época de los nativos americanos hasta la llegada de los colonos europeos. Durante el siglo XIX, la ciudad fue un importante punto de parada para los trenes y jugó un papel vital en el desarrollo del ferrocarril en la región.
Este pueblo es famoso por la Ruta 66. La ciudad cuenta con varios letreros de neón y moteles clásicos que evocan la era dorada de la Ruta 66.
Nuestra primera parada es en Tucumcari Trading Post. Esta antigua tienda es ahora una gran tienda de antigüedades, aunque muchas veces esta cerrada. Al lado tiene un motel antiguo en funcionamiento, aunque no es muy apto para pernoctar.
Vamos circulando muy despacio por su calle principal, y aquí hay un monumento que está bien para tener una foto de recuerdo.
Un poco más adelante, paramos a comprar provisiones enfrente del taller de Clay, un taller Old School. Su propietario Clay es genial, pero hoy estaba cerrado.
Unos cientos de metros mas tarde, aparcamos las motos para ver el Blue Swallow Motel.
Construido en 1939 por W.A. Huggins, este icónico establecimiento ha mantenido su encanto vintage y se ha convertido en una parada popular para los viajeros que recorren la Ruta 66.
El motel destaca por su distintivo letrero de neón que presenta una golondrina azul en vuelo, de ahí su nombre “Blue Swallow” (Golondrina Azul). El letrero se ha convertido en un emblema de la Ruta 66 y es uno de los más importantes letreros de neón originales que aún se conservan en la zona.
El Blue Swallow Motel ha sido restaurado y renovado a lo largo de los años para preservar su autenticidad y brindar a los visitantes una experiencia retro y nostálgica. Las habitaciones están decoradas al estilo de la década de 1940, con muebles de época.
Además de ser un lugar de alojamiento, el Blue Swallow Motel se ha convertido en una parada imprescindible donde los visitantes pueden capturar la esencia de la legendaria carretera.
Seguimos ruta por la Interestatal 40 hasta que llegamos al quinto estado del viaje, Texas.
22 Millas mas tarde, llegamos a Adrian, un pequeño pueblo de la 66 significativo por ser el punto intermedio del viaje Route 66.
Un letrero indica las distancias hasta Santa Monica, California y Chicago, Illinois. 1.139 millas en cada sentido.
Este último tramo de la ruta de hoy es hasta Amarillo, será el lugar de pernocta. Pero antes, pararemos en un lugar mítico y muy famoso, el Cadillac Ranch.
Fue creado en 1974 por un grupo de artistas conocido como “Ant Farm”. Los Artistas eran Chip Lord, Hudson Marquez y Doug Michels. La instalación consiste en diez automóviles Cadillac enterrados en posición vertical en un campo cerca de la carretera interestatal I-40.
Los coches están enterrados en ángulo, con sus parte delantera hundida en la tierra y su parte trasera apuntando hacia el cielo. A lo largo de los años, el Cadillac Ranch se ha convertido en un símbolo icónico de la Ruta 66 y es una parada popular para viajeros y entusiastas del arte.
Una de las características más interesantes del Cadillac Ranch es que los visitantes están invitados a interactuar con la instalación. Pueden pintar y decorar los autos con aerosoles de pintura, lo que ha llevado a que la instalación cambie constantemente a lo largo del tiempo debido a las nuevas capas de pintura aplicadas por los visitantes. Esta participación activa ha convertido al Cadillac Ranch en una obra de arte en constante evolución.
Es importante tener en cuenta las condiciones y el estado del Cadillac Ranch. Lleva muchos años ahí y su estado empieza a ser precario. Ojalá dure muchos años mas.
En muy poco tiempo, llegamos al hotel de hoy, pero el día aun tiene un aliciente mas, la cena.
La cena, como es tradición en los viajes de Route 66 Experience, se hace en un lugar especial llamado Big Texan Steak Ranch.
El restaurante fue fundado en 1960 por R. J. “Bob” Lee. Una de las principales atracciones del restaurante es el desafío de comida llamado “The Big Texan Challenge”. Consiste en comer un bistec de 72 onzas (aproximadamente 2 kg) junto con guarniciones en menos de una hora. Si un comensal completa el desafío, la comida es gratuita, de lo contrario, deben pagar el costo del plato.
El restaurante tiene una decoración temática del oeste, con elementos que evocan la cultura y la historia de Texas. Los visitantes pueden disfrutar de la atmósfera única mientras disfrutan de sus comidas.
En resumen, el Big Texan Steak Ranch es conocido por su comida abundante, el desafío del bistec, su ambiente temático del oeste y su ubicación en la Ruta 66. Es un destino popular para los amantes de la carne y los viajeros que buscan experimentar la cultura del oeste en Texas.
La noche se alarga un poco, pero disfrutamos del lugar y nos vamos a dormir con las barrigas llenas y contentos por otro día de ruta genial.
Mañana más millas de Ruta 66.
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Mañana más relatos y fotos de nuestra aventura en moto por EEUU.
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